El marketing olfativo es una estrategia utilizada por enseñas de todos los sectores con el objetivo final de incrementar la facturación en su negocio. La importancia de la elección del aroma adecuado reside en que el sentido del olfato se dirige hacia el centro del cerebro, el cual se relaciona con los recuerdos y emociones, llegando a ser incluso más potente que el sentido visual. Es por esta razón que, en la búsqueda de la fragancia correcta, se debe seguir una estrategia con la que se consiga que un olor sea identificado con una empresa y los valores que ésta transmite.
Seguir un planeamiento correcto ayudará a aportar un valor añadido a la imagen de marca, creando una experiencia única en el cliente, diferenciándose de la competencia, teniendo una identidad única y consiguiendo, consecuentemente, la fidelización de los clientes. Así lo demuestran numerosos estudios emplazados en este mercado, que han revelado que aquellas empresas que apuestan por incluir en su negocio técnicas de marketing olfativo han experimentado un aumento de la demanda de sus productos y, por tanto, una facturación mayor. Pero, esta técnica no solo ayuda a aumentar el deseo de compra de los clientes y el tiempo que éstos pasan en el establecimiento, sino que también contribuye a generar un mejor ambiente laboral.
Dentro de las franquicias que han apostado por el marketing olfativo se encuentra Ambiper, cuya labor comercial se centra en la fabricación de perfumes propios, que dirige a espacios públicos y comerciales a través de sistemas de difusión olfativa, proporcionando a empresas soluciones olfativas en sintonía con su filosofía y valores, lo que les proporciona una personalidad única. La enseña tiene la capacidad de crear fragancias únicas en cuatro sencillos pasos, en los que teniendo en cuenta la demanda del cliente se desarrollan algunos ejemplos de aromas que pueda utilizar en un su negocio para, posteriormente, desarrollar el aroma corporativo definitivo.
Conoce la importancia que su labor tiene en la sociedad actual, dirigiéndose a tres sectores fundamentales: oficinas, los hoteles y las tiendas de moda. En el primer caso, ayuda a combatir la presión laboral y mejorar el rendimiento y la productividad de los trabajadores, mientras que en los hoteles ayuda a los clientes a recordar sus vacaciones de manera más nítida e inolvidable. En el último caso, se trata de una manera de comunicar la imagen de marca, favorecer el impulso de compra y ayudar a que los clientes estén más relajados durante esta actividad.
Antonio Martorell, gerente de la franquicia Ambiper, señala al respecto que “a día de hoy el marketing olfativo forma parte de la identidad de una empresa. La gente relaciona los aromas, perfumes y olores con una determinada marca, llevándose un recuerdo de la misma y reconociéndola. Por este motivo, muchos potenciales clientes buscan esto, por lo que se puede decir que se trata de una tendencia que se encuentra en aumento ya que las empresas buscan diferenciación”.
La red de franquicias de Ambiper propone a sus candidatos dos modelos de negocio dirigidos a perfiles de autoempleo o a comerciales con personal a su cargo en los que, sin necesidad de local, operan en una zona de exclusividad y en un sector en auge por una baja inversión. A éstos, cuyo perfil se corresponde con gente abierta y entusiasta, se les proporciona formación inicial y apoyo de manera continuada, para que su apuesta por las franquicias sea un éxito “en un sector que va en aumento y en el que siempre hay nuevos clientes, peticiones y dudas, entre otros. No hay nunca un patrón fijo, ya que a cada cliente y empresa le corresponden unas notas aromáticas diferentes”, enfatiza Martorell.
Desde la central de franquicias estudian a qué se dedica el negocio y, consecuentemente, qué tipo de aromas le pueden encajar mejor. Entre los factores a tener en cuenta también se incluye la zona geográfica en la se emplaza la enseña, así como la cultura y el gusto de la misma, debido a que cada país o zona tiene su propia cultura olfativa. Teniendo también la opinión del cliente en cuenta, Ambiper les permite elegir entre tres o cuatro propuestas que, en todos los casos, son exclusivas.
Debido a ello se trata de un negocio en que las tendencias no existen, pero sí los planes, que llevarán a Ambiper en los próximos meses a expandirse llegando a más provincias de España, así como a una expansión internacional, lo que les conducirá a tener reconocimiento a nivel europeo.
La actual y alta demanda de las empresas de no tener un simple ambientador que cubra los olores, sino diferenciarse a través de un aroma corporativo hace que desde Ambiper miren hacia el futuro del sector de manera positiva. A pesar de prever un aumento de su competencia, la larga trayectoria de la enseña olfativa hace que ésta apueste por “una amplia gama de ofertas y productos testados que nos van a permitir ser competitivos y que nuestros clientes estén satisfechos”. Adicionalmente, la firma fabrica los aromas, sin intermediarios y entregando el producto directamente a sus franquiciados, lo que junto con una buena estrategia comercial, les permite ser rentables y productivos.
Por otro lado, desde Ambiper también tienen en cuenta la importancia de la digitalización del negocio, motivo por el que, poco a poco, han ido implementando mejoras en ese aspecto que les han llevado a tener actualmente “bastante desarrollado el tema de las comunicación digitales, conformación, tutoriales para franquiciados acerca del concepto de marketing olfativo y de estrategias de ventas y webinars”, indica el gerente de la firma. Además, dentro de su estrategia digital Ambiper proporciona a sus franquiciados la oportunidad de no tener que desplazarse hasta las empresas que hayan apostado por sus productos de marketing olfativo para calibrar los dispositivos y poder usar una solución de wifi a larga distancia, lo que también la calidad de los difusores.
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